PEPE CAMARA
Una muy interesante y visionaria propuesta recién presentó el senador Juan Quiñonez Ruiz, respecto a actualizar el Código Civil Federal y leyes General de Vida Silvestre y de Aguas Nacionales, con lo que se otorga personalidad jurídica a arroyos, ríos, mares, lagunas, lagos, cenotes y cascadas de México, y se convierten en sujetos de derechos a la protección, conservación, mantenimiento y restauración a cargo del Estado.
Estos sistemas naturales contarán con una Defensoría y una Comisión integradas por defensores ambientales y expertos en la materia, quienes velarán por la vigencia, promoción, difusión y cumplimiento de sus derechos.
El legislador de Movimiento Ciudadano, en su iniciativa con proyecto de decreto, plantea reformar y adicionar diversas disposiciones de esas leyes secundarias, y coadyuvar a crear una nueva cultura de protección al medio ambiente y los recursos naturales.
Su exposición de motivos, señala que actualmente, un gran número de ríos, caídas de agua, mares, lagos y lagunas de nuestro país están afectados por la contaminación derivada de asentamientos humanos, uso indiscriminado e inconsciente del agua por parte de particulares y grandes empresas, que han traído consigo, degradación de ecosistemas y muerte de gran número de seres vivos.
Recuerda que en 2016 al río Tunal, en Durango, la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales, perteneciente al Sistema de Aguas Municipales, descargó aguas residuales; en 2018, la minera Primera Empresa Minera provocó el derrame de 200 litros de solución cianurada al río Piaxtla, en San Dimas, en la misma entidad federativa, cuando una pipa se accidentó y derramó la solución al río.
Quiñonez Ruíz, recuerda que el Estado Mexicano ha ratificado diversos instrumentos internacionales, asumiendo compromisos para la protección del medio ambiente, que obligan al gobierno en cada uno de sus niveles, a tomar las acciones necesarias a fin de preservar la integridad del sistema ambiental y la conservación de la biodiversidad.
Razón por la que, resulta inconcebible que México presente uno de los mayores índices de degradación ambiental del mundo, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática, donde se asegura que la destrucción ambiental del país equivale a 8.8 por ciento del Producto Interno Bruto.
La propuesta se turnó para estudio y dictamen a las Comisiones Unidas de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Cambio Climático y de Estudios Legislativos.
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