PEPE CAMARA
Durante el foro “Hacia un balance de la reforma constitucional en paridad de género”, organizado por el Instituto Belisario Domínguez (IBD), se puso de manifiesto que paridad iguala oportunidades entre hombres y mujeres para desempeñarse en cargos públicos; empero, la reforma recién aprobada no se conoce en todos los rincones el país, incluyendo municipios indígenas.
Al respecto la senadora del Partido Revolucionario Institucional, Nuvia Mayorga Delgado, precisó: esta circunstancia prevalece más entre mujeres indígenas que desconocen que pueden ocupar espacios de toma de decisiones públicas y de participación política.
Las mujeres son tan capaces como los hombres para ocupar cargos hasta ahora dirigidos por varones, pues están diseñados para mexicanas y mexicanos, pero se requiere que la ley se cumpla.
Que no haya simulaciones, la LXIV Legislatura tiene que ir caminando, avanzar junto con los hombres, nadie atrás ni adelante. Tenemos las mismas oportunidades y las necesidades económicas actuales así lo exigen.
Martha Patricia Patiño Fierro, directora General de Difusión y Publicaciones del IBD, apuntó que la reforma podría calificarse como una reforma política, al introducir una nueva regla de acceso al poder: la paridad como principio fundamental para la composición de poderes, órganos autónomos y ayuntamientos.
La creación de un frente por la igualdad es buena noticia para los pendientes, como la aprobación de leyes secundarias en la materia. Otro es la paridad en el Poder Judicial.
Es necesario promover la paridad en los órganos internos de los partidos políticos, puntualizo´; es de reconocer las propuestas del senador Ricardo Monreal Ávila, para insertar la paridad en los principales órganos colegiados del Poder Judicial a nivel federal y local, y en el seno de los partidos políticos.
La Consejera Electoral del INE, Adriana M. Favela Herrera, reconoció la valiosa intervención de las senadoras impulsoras de la reforma y propuso que el Senado establezca que cada entidad federativa y partido político postule a un hombre y una mujer para que, independientemente que gane una fuerza, siempre se tenga una representación de varón y mujer por entidad.
Adicionalmente, la diputada América Rangel Lorenzana, del Congreso de la CDMX, puntualizó que la reforma pretende transitar de una cultura de cuotas a una integral que permita de manera natural y transversal, la inclusión de las mujeres en la vida pública, que cada quien asuma lo que le corresponda en la toma de decisiones.
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