Vaya contradicción. Mientras que la Ciudad de México se inunda por las lluvias atípicas que arrasan con muebles, viviendas y hasta con la vida de las personas, por otro lado, la gente padece de sed. El peor problema del vital líquido es que criterios políticos, más que técnicos, fueron la base que utilizó la Secretaría de Finanzas del Distrito Federal para zonificar el cobro del agua en el DF.
Al llegar las primeras boletas a las casas iniciará el descontento, porque será cobro injusto de hasta 400 por ciento más y sólo resultarán beneficiadas las personas que viven en las colonias donde imperan los intereses de las tribus del PRD.
Una vez más queda demostrado que los legisladores locales hacen las cosas al vapor sin conocer la perspectiva de los habitantes del Distrito Federal, no sólo sobre el costo del vital líquido, sino sobre la problemática general del agua. Supuestamente, en el agua no debe haber diferencias sociales y, mucho menos, en su cobro.
Los diputados del PAN aseguran que está comprobado que los criterios utilizados para la clasificación incurren en graves injusticias, toda vez que existe, a la fecha, un margen de error del 25 por ciento de las manzanas que hasta hoy se han revisado para determinar si son altas, medias, bajas o populares.
Las tribus del PRD chantajearon al Gobierno del Distrito Federal (GDF) para obtener beneficios en el tema del agua, en distintas zonas de la Ciudad. Supuestamente, sólo se beneficiará la gente que los apoya en las elecciones electorales.
Colonias de la Gustavo A. Madero, Iztapalapa, Miguel Hidalgo, Benito Juárez y Cuajimalpa, entre otras, resultan afectas, porque no están dentro del padrón del PRD.
Pero diputados de este instituto político y del PT consideran que los integrantes del PAN sufren de bipolaridad e incongruencia, porque sus legisladores aceptaron los acuerdos a que se llegaron respecto de las tarifas de agua en la Comisión de Gobierno de la ALDF.
En esa ocasión, hicieron corresponsable a José Luis Luege Tamargo, titular de la Conagua, de todo lo que sucede en la Ciudad de México, es decir, tanto del suministro de agua, como de las inundaciones.
Supuestamente, la Conagua ha aumentado el costo del vital líquido en bloque en 61 por ciento a la Ciudad de México, en los últimos cuatro años. Por ello, el GDF y la ALDF se vieron obligados a ajustar las tarifas, pero sin eliminar el esquema de subsidios.
Traer un metro cúbico al DF cuesta 23 pesos bimestrales y, sin embargo, se mantendrán los subsidios en 94 por ciento de las zonas populares, de tal manera que, al final, el costo para el consumidor será de dos pesos y fracción por metro cúbico. Sólo cuando lleguen las boletas se sabrá quién tuvo la razon: el PAN o el PRD.
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