Opinión

Pico de Pollo

¿Cómo que el mundo está convertido en un gran “reality”, en un “Big Brother” que todo lo ve y lo escucha, incluso, mejor que los sistemas del Cisen, de la CIA o de la DEA?. O sea cómo. Entonces ¿a dónde vaya me están checando, mi vieja puede saber en cualquier momento dónde estoy?. Con cara de preocupación, y diría que hasta terror, es que pregunta el patriarca sobre una parte de la plática que alcanzó a escuchar.
¡No manchen!. ¿No me digan que me agarró dormido y ya me implantó ese famoso chip que le permite a tu media naranja saber dónde, cuándo, cómo y en qué condiciones estás, por qué no me avisaron que ya se podía comprar el cualquier tienda de autoservicio?.
Cuál sería la cara que pusimos la secretaria de Desarrollo Social de esta columna y yo-yo, que de inmediato adelantó el papá de los polluelos. No me dejen en la ignorancia, díganme desde cuándo me anda monitoreando la mandamás, con razón de pronto me hace comentarios medio extraños, así como si escuchara mis pláticas privadas, y pues no vaya a ser que en una de esas me caiga en la maroma.
De nuevo la funcionaria de gabinete y el alado intercambiamos miradas. Mira, alcancé a decir mientras de nueva cuenta se desbocaba el chiva de chivas, hijo mío entiende que mi integridad está en juego o ¿qué, acaso quieres un padre incompleto?. Nada de chip, dije antes de otra cosa, hablamos de un visor de internet. el Google Street. ¡Vaya, qué susto!. Pero no puede seguirme con eso ¿o sí?.
“Oyes” patriarca, pero ¿por qué te preocupa tanto si tiene muuuuuucho tiempo que te portas bien y has dejado de lado la vida derrochadora, de vicios, de juego y perdición de antes?. ¡Sí es cierto, verdad!, pero es que fue un reflejo, algo así como una voz interna que, sin querer queriendo, me puso en alerta.
Tienes, por enésima ocasión, toda la razón hijo mío, no tengo por qué preocuparme desde hace mucho soy un patriarca nuevo, responsable de mis actos y sobre todo libre para disfrutar de la felicidad del mundo mundial. Ajúa.
Pero es que en parte tiene razón el jefe grande, se trata de la secretaria de Desarrollo Social que se había mantenida atenta al diálogo, pero sin intervenir, en cualquier momento te agarran con las manos en quién sabe dónde con ese buscador.
Calma, tampoco le hagas el juego al papá de los emplumados, no es para tanto, igual y de todos modos quién debe saber lo que uno hace lo sabe y lo requeté sabe.
Pero, agregó, no podrás negar que no es lo mismo, vamos una cosa es que sepas o te imagines que alguien te escucha, ve y sigue a que lo compruebes. ¿Te imaginas, vayas dónde vayas te están observando? ¡ Y qué, yo me porto bien por convicción y deseo!. Es más estoy en el camino de ser ejemplo de lo que puede hacer un hombre que se ha redimido. ¡Orales!. Cierro pico. Ven y ve r

Mi correo es: oviparo2002@yahoo.com.mx

Acerca de Alfredo Albíter Sánchez

El autor no ha proporcionado ninguna información.

Comentarios Cerrados

Los comentarios están cerrados. No podrás dejar un comentario en esta entrada.