A escasos meses de que termine el sexenio del Presidente Felipe Calderón, la Secretaría del Medio Ambiente, que preside Juan Elvira, dio a conocer la intención del gobierno federal de poner en marcha el proyecto turístico Los Pericúes, que no es otra cosa que una versión modificada de lo que era Cabo Cortés, y que fue suspendida gracias a la oposición de la población y grupos ecologistas del país.
Greenpeace México denunció que a sólo dos meses de que se logró detener uno de los megaproyectos más depredadores de nuestro país, Cabo Cortés, la reserva marina de Cabo Pulmo está amenazada una vez más por un nuevo proyecto turístico.
El arrecife del Parque Nacional Cabo Pulmo, en Baja California Sur, es considerado uno de los más productivos y mejor conservados del mundo, gracias a que los habitantes de la comunidad decidieron dejar de pescar en él y dedicarse al ecoturismo.
Este paraíso único, agregó, se vio amenazado a principios de año por el megaproyecto Cabo Cortés, que pretendía construir 27 mil cuartos de hotel en esta zona desértica, junto a la reserva. Gracias a la participación de la población y grupos ambientalistas que votaron por la conservación de los recursos naturales, se logró la cancelación del proyecto.
Desafortunadamente, dijo Greenpeace, el 20 de agosto fue presentado ante la Secretaría de Medio Ambiente (Semarnat), un nuevo proyecto llamado Los Pericúes que no es más que una nueva versión, un refrito, de Cabo Cortés. Unos cuantos cuartos de hotel y unos hoyos de golf menos, pero igual de depredador.
Exijámosle al Secretario de Medio Ambiente, Juan Elvira, a través de las redes sociales, que abra el proceso de consulta pública para que todos podamos decir porqué no se debe construir este nuevo Cabo Cortés.
Dicho organismo sostuvo que el presidente Felipe Calderón y Juan Elvira quieren aprobar ese proyecto antes del cambio de gobierno, por lo que hizo un exhorto par detener al turismo depredador.
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