En México se consumen 87 millones de metros cúbicos y se prevé que para el 2030, se requerirán 92 millones de metros cúbicos, por lo que es necesario frenar la sobreexplotación de los mantos acuíferos, ya que de los 653 que existen en el país, 120 registran esta problemática, principalmente en la Ciudad de México (CDMX) y área conurbada, afirmó el Coordinador Politécnico para la Sustentabilidad del Instituto Politécnico Nacional (IPN), Héctor Mayagoitia Domínguez.
El científico mexicano destacó que ante esta situación, el IPN ha realizado proyectos de investigación respecto al tratamiento de aguas municipales residuales; análisis del impacto ambiental que generan las descargas de agua residual de industrias alimenticias de la Ciudad de México.
Así como diseño de equipos para la recuperación de agua pluvial; purificación con energía solar; diseño de equipos de radiofrecuencia para detectar fugas en las líneas subterráneas de aguas; equipos ambientales para el reúso de aguas grises en casas habitación y el diseño de la Planta de Tratamiento de las Aguas Residuales (40l/s) ubicada en la zona de Zacatenco, ubicada en el norte de la capital mexicana a construirse en el 2019.
Explicó que hay un déficit de 100 millones de metros cúbicos anuales entre lo que se extrae y lo que se recarga del acuífero. Asimismo, comentó que el tratamiento de las aguas residuales generadas en la Ciudad de México es tan solo del 10 por ciento, mientras que a nivel nacional es del 47 por ciento. Además el 70 por ciento del agua potable que consumimos proviene del sobreexplotado acuífero y el 30 por ciento restante del Sistema Lerma Cutzamala (que trae agua desde el estado de Michoacán y Estado de México para la capital).
Ante esta situación, urgió en la necesidad de aplicar acciones que generen el ahorro del agua mediante la captación, tratamiento y reutilización, a través de mayores inversiones públicas y privadas para la aplicación de tecnologías más eficientes enfocadas al adecuado manejo del vital líquido, ya que actualmente el líquido va al drenaje y posteriormente al Golfo de México.
Mayagoitia Domínguez señaló que para cumplir los acuerdos signados el 25 de septiembre de 2015 por los 150 Jefes de Estado convocados por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en el marco de la Agenda 2030, esta universidad con base en la Ley Federal de Austeridad, utiliza agua tratada en los sistemas de riego, análisis del impacto ambiental que generan las descargas de agua residual, la sustitución de grifos convencionales por los de cierre automático en los lavamanos.
También, se lleva a cabo la sustitución de mingitorios convencionales por ecológicos libres de descarga de agua; la revisión periódica de instalaciones sanitarias para evitar fugas de agua; el reemplazo de depósitos de agua de los sanitarios por unos de menor consumo; el evitar desperdicio del líquido en los laboratorios de enseñanza e investigación, entre otras acciones.
Comentarios Cerrados