México posee el 12% de la diversidad mundial de fauna y flora. Alrededor de 200 mil especies distintas habitan en el territorio mexicano: 733 reptiles, 448 mamíferos, 290 anfibios, 26 mil plantas y mil 96 aves. Por esta razón es catalogado como un país “megadiverso”.
Es bien sabido que por medio de la actividad humana se han perdido algunos ejemplares y otros están en peligro de extinción. Aunque éste es un proceso natural que ha existido desde hace muchos años, en la actualidad el ritmo con el que desaparecen es cuatro veces mayor. Lo preocupante es que una de las principales causas es la actividad humana.
Por ello, cada vez más empresas alrededor del mundo migran a la economía circular, modelo que engloba tanto ecología como desarrollo financiero, por medio del que sería posible preservar los recursos naturales durante el mayor tiempo posible. Permite reducir los desechos al mínimo, ya que los componentes pueden utilizarse una y otra vez para crear más valor.
Un claro ejemplo de este concepto son las empresas que han implementado soluciones innovadoras para reutilizar energía, agua y residuos sólidos. De esta forma, se impacta menos en los ecosistemas y se protege a las especies.
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