Sustentabilidad

Guerra petrolera y energéticas verdes

Luis Enrique Velasco

La caída brutal del precio del petróleo afecta a empresas fabricantes de tecnologías para producir energías verdes, generación del fluido con estiércol y de biocombustibles, expansión del uso del automóvil eléctrico e híbridos, además de dificultará la consecución global de reducción de contaminantes terrestre, agua, aire y atmosféricos.

          El mercado muestra correlación entre precios bajos del petróleo y los impactos negativos en la industria energética renovable. Por ejemplo, el Índice Bloomberg Global Large Solar que cuentas con 21 compañías, nos dice que las acciones de esas empresas se han depreciado más del 40 por ciento.

          Por lo que toca a los tres más grandes fabricantes chinos de paneles fotovoltaicos, la devaluación de sus acciones anda entre el 50 y 75 por ciento, por lo que en estos momentos pasan por momentos apremiantes.

          Diversos entes internacionales consideran que bajar el precio de petróleo con una sobreproducción es la guerra que los petroleros declararon a las energética verde, con la finalidad de seguir vendiendo grandes cantidades del combustible fósil que tantos daños medioambientales causó al planeta.

          Los mercados de valores también consideran que los verdaderos enemigos de las energías verdes son el carbón y gas natural, con los cuales, Estados Unidos, China, India y la mayoría de los países desarrollados, producen la mayor parte de su electricidad.

Asimismo, se explica que en la actualidad en Europa, el precio del petróleo sí afecta directamente la generación de energía solar, especialmente cuando llegó a 38 dólares por barril. Esto porque sale tan caro producir la renovable como la contra con combustible fósil.

Para estos últimos días en que el precio del barril de crudo andaba en 31.10 dólares, definitivamente sale más barato hacer electricidad con el producto fósil que solar. Aunque ciertamente los petrolíferos generan mucha contaminación.

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Ahora, para que los petrolíferos representen realmente una competencia para la producción de energía eólica, el precio del barril de crudo tiene que llegar a 14 dólares.

Por lo que toca al caso específico de México y dada su geografía y sus vientos, para que el petróleo sea competitivo en la generación de electricidad eólica, su precio debe llegar a 12.3 dólares.

A pesar de que el precio del petróleo se desplomó y que costo de la generación de energía solar y eólica  bajó 78 y 58 por ciento, las inversiones en la producción de la energética renovable se incrementó 16 por ciento anual en estos tiempos de devaluación del combustible fósil.

El desplome del precio del petróleo no impacta la generación de energía, toda vez que esta industria solamente consume el 5 por ciento de petrolíferos. Sin embargo, sí le pegará a la inversión y generación de biocombustibles líquidos, según reconoce la Agencia Internacional de Energía Renovable.

          Asimismo acepta que otro sector que saldrá dañado es el de la movilidad de automóviles eléctricos e híbridos. Por lo tanto, estos autos sufrirán un retraso para comercializarse en forma masiva.

          Indudablemente que la caída del precio del crudo crea incertidumbre en la industria de las energías renovables, toda vez que se prevé una reducción en el costo del gas natural y eso representará una desventaja para los productores del fluido eólico y solar.

          Para la IRENA, estos nubarrones que amenazan a las energías renovables pronto tendrán que disiparse, porque en algunos países, el kilovatio-hora tiene costo de tan solo 6 centavos de dólar gringo, lo que significa es 3 centavos más barata que la que se produce con gas natural.

          Además, el ente confía en que en un futuro no lejano, la energía eólica, geotérmica, hidráulica y de biomasa serán más baratas que aquellas que se producen a base de carbón, petróleo y gas.

          Algo que preocupa al ente rector es que la producción de energía sustentable no ha tenido un despegue como el que en realidad se esperaba, pues anda en el 22 por ciento.

          Otro preocupación es que el consumo de energías verdes se mantiene en 19 por ciento desde el 2011 a la fecha con esta cifras, la IRENA duda que la producción y demanda se duplique para el 2030, tal cual lo estableció la Organización de las Naciones Unidas.

          De acuerdo con la ONU, el crecimiento en la producción de energías renovable debe ser el 1 por ciento anual, por lo menos, pero en lugar de eso se tiene un raquítico aumento de apenas 0.2 porcentuales.

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GRINGOS AFECTADOS

Ganaderos estadounidense que desde hace 10 años vienen invirtiendo muchos millones de dólares para convertir el estiércol del ganado en electricidad, se vieron en la necesidad de desmantelar sus  digestores anaeróbicos, toda vez que con la caída del precio del petróleo, ya no les es rentable continuar con ese proyecto.

          La ganadería en Estados Unidos representa el 36 por ciento del metano que se envía a la atmósfera y con la debacle petrolera, este país no podrá conseguir sus metas de reducción del contaminante.

          Hay que señalar que con el estiércol de mil reses es suficiente para producir toda la energía eléctrica que consumen al día, 250 hogares estadounidense, cuya demanda es considerada muy alta.

GRANDES PRODUCTORES

1.- Estados Unidos 13.45 MBDP*

2.- Arabia Saudita 11.73 MBDP

3.- Rusia 10.44 MBDP

4.- China 4.197 MBDP

5.-Canadá 3.856 MBDP

México aparece como noveno con 2.946 MBDP

La producción mundial supera los 90 MBDP

MBDP*= Millones de barriles diarios de petróleo

Acerca de Juan Carlos Machorro

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