El Procurador Federal de Protección al Ambiente, Guillermo Haro Bélchez realizó una gira por el estado de Durango, en donde manifestó que el 82 por ciento de la deforestación se debe a los desarrollos inmobiliarios sin autorización en zonas de vocación forestal.
Asimismo, la tala ilegal representa el 8 por ciento de deforestación total que existe en el país; plagas e incendios constituyen el 10 por ciento.
Al hacer entrega de Certificados de Auditoría Ambiental, el titular de la Profepa destacó la importancia de la tarea que desempeñan los Comités de Vigilancia Ambiental Participativa (CAVP) en el cuidado de los bosques, tomando en cuenta que hoy no es posible la instrumentación de ninguna política pública sin el apoyo coordinado de autoridades y la participación de la sociedad.
Haro Bélchez dijo que la meta es lograr al final de la presente administración federal la integración de cuando menos 3,000 Comités de Vigilancia Ambiental Participativa “que nos ayuden en la vigilancia y eviten la tala ilegal”. Precisó que al momento se registra un avance del 10 por ciento.
Además, señaló que la mayor parte de la deforestación nacional se debe a desmontes agropecuarios sin autorización, lo que significa que el 82 por ciento de terrenos con vocación forestal se utilizan de manera irregular para desarrollos inmobiliarios.
Por ello, expuso que ha dado la instrucción a todos los Delegados Federales de la Profepa para que vigilen que no exista un solo desarrollo inmobiliario que no cuente con las autorizaciones correspondientes emitidas por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
“La tala ilegal sólo representa el 8 por ciento. Y otros casos como plagas e incendios cubren el 10 por ciento restante (de la deforestación nacional)”, indicó.
Explicó que el territorio nacional cuenta con más de 197 millones de hectáreas, de las cuales casi el 70 por ciento son áreas verdes, donde en 7.5 millones de hectáreas existe el manejo forestal, es decir, producción de madera que puede ser comercializada de manera legal.
Sin embargo, dijo que la producción forestal en el país es de más de 7 millones de metros cúbicos, que solamente satisface el 20 por ciento del consumo nacional.
Señaló que entre 1990 y 2000, México fue el séptimo país con mayor deforestación a nivel mundial, con 354 mil hectáreas devastadas. Abundó que en el 2012 se registró un decremento y la cifra se ubicó en 155 mil hectáreas dañadas, “dato que no deja de ser preocupante y que demuestra la gran tarea que tenemos sobre este particular”, apuntó.
Al hacer entrega de Certificados de Auditoría Ambiental, Haro Bélchez informó que en el estado se encuentran asentadas 1,353 empresas de jurisdicción federal, de las cuales sólo el 7 por ciento se han adherido al Programa Nacional de Auditoría Ambiental (PNAA).
Por ello, destacó la necesidad de que los tres niveles de gobierno cierren filas para que cada día un mayor número de empresas cumplan, de manera voluntaria, con la legislación ambiental.
Por lo anterior, comentó que el gran reto es incrementar el 7 por ciento de cumplimiento voluntario de las empresas en Durango, al 80 por ciento al término de la actual administración federal. “Estaremos vigilantes en promover este gran propósito”, señaló.
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