Como parte de los esfuerzos entre México y Estados Unidos por recuperar al Lobo Gris Mexicano, la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) liberó, en coordinación con la Dirección General de Vida Silvestre y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, una familia de once ejemplares de Lobo Mexicano, procedente del estado de Nuevo Mexico.
La manada de lobos conocida como Manada “La Escalera”, proveniente de Ladder Ranch en Nuevo México, fue liberada en la zona de influencia del Área de Protección de Flora y Fauna Campo Verde, en el estado de Chihuahua el pasado 1º de diciembre, donde se espera que estos ejemplares puedan adaptarse y sobrevivir en su medio natural. La familia está integrada por la pareja reproductiva SB 1067 Y 1222, y dos camadas de 6 y 18 meses de edad.
La manada de “La Escalera”, está conformada por una pareja (macho y hembra) de 9 y 5 años respectivamente, y sus nueve crías: seis machos (SB 1425, 1426, 1427 y 1498, 1499, 1500) y tres hembras (SB 1501, 1502 y 1503) de 6 y 18 meses de edad. Es importante resaltar que esta manada es la décima liberación de lobos llevada a cabo en México, y es también la más numerosa que se haya realizado jamás, sumando ahora un total de 39 ejemplares liberados en México (20 machos y 19 hembras).
En los años setentas, el Lobo Gris Mexicano se encontraba prácticamente erradicado de su medio natural, y con la captura de ejemplares en México y su traslado a los Estados Unidos dio inicio el Programa de Manejo y Reproducción en Cautiverio, dando pie así a esta importante colaboración entre los dos países.
Actualmente, el número total de la población cautiva de Lobo Mexicano es de alrededor de 300 ejemplares en total, que incluye a las poblaciones de México y Estados Unidos.
El Lobo Mexicano, es la subespecie genéticamente más distinta del Lobo Gris, y se considera a nivel mundial como la población de lobos en mayor peligro de extinción. Su peso promedio es de sólo 33 kg para los machos y 27 kg para las hembras, alcanzando apenas los 80 cm. de altura a la cruz. Originalmente se distribuía desde el Sur de los Estados Unidos de América, en México por ambas Sierras Madre (Occidental y Oriental) hasta el Eje Neovolcánico; algunos autores incluso afirman que hasta Oaxaca.
Su extinción se debió a campañas intensivas de erradicación por parte de agencias gubernamentales, tanto de Estados Unidos, como de México, principalmente por incomprensión de la importancia de su presencia en los ecosistemas saludables.
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