PRNewswire.- Los automóviles eléctricos provocan daños ocultos al medio ambiente y a la salud y son, probablemente más nocivos que los automóviles a gasolina y otras opciones de transporte, según un informe revisado por pares publicado en el informe, Unclean at Any Speed (Sucio a Cualquier Velocidad), el cual indica que los miles de millones gastados recientemente en subsidios para el Tesla, el Nissan Leaf, y otros automotores eléctricos podrían, en realidad, estar haciendo más mal que bien, una vez considerado el ciclo de vida total de los vehículos eléctricos. Recomienda derivar los subsidios para los autos eléctricos a opciones más robustas, respaldadas por investigación, incluidas las pruebas de emisiones, la infraestructura para bicicletas, las iniciativas de reducción del smog y los cambios de destino de las tierras.
El autor del artículo, Ozzie Zehner, que una vez fue un entusiasta del coche eléctrico, pero ha cambiado desde su posición. «Tras un examen más detenido, pasando de vehículos de petróleo como combustible para los coches eléctricos se empieza a manifestar equivale a pasar de una marca de cigarrillos a otro», escribe Zehner, profesor visitante en la Universidad de California – Berkeley y autor de las ilusiones verdes (http :/ / www.greenillusions.org/).
Su trabajo identifica cómo los coches eléctricos más que cambiar los efectos negativos de un lugar a otro: «la mayoría de las evaluaciones de coches eléctricos analizar solamente la carga del coche Este es de hecho un factor importante, pero un análisis más riguroso sería considerar los impactos ambientales a lo largo del vehículo de.. ciclo de vida, desde su construcción hasta su operación y en su eventual retiro en el depósito de chatarra. »
El documento también analiza cómo se realiza la investigación del coche eléctrico, detallando lo que se cuenta, lo que queda fuera, y por qué. También señala que el patrocinio corporativo de investigación de vehículos eléctricos en la Universidad de Georgetown, MIT, Universidad de Michigan, la Universidad de Stanford, la Universidad de Indiana, la Universidad de California – Davis, de la Universidad de Delaware y la Universidad de Colorado. «Los resultados de los estudios apoyados por las empresas no son necesariamente mal», comenta Zehner «, pero los investigadores están demasiado a menudo haciendo las preguntas equivocadas.»
Su informe detalla cómo las prioridades políticas y la influencia de las empresas han creado una impresión errónea de que los coches eléctricos reducen significativamente el impacto del transporte.
Mientras tanto, presunta limpieza del coche eléctrico no ha realizado el escrutinio de amplios estudios, financiados con fondos públicos de la Academia Nacional de Ciencias, la Fundación Nacional para la Ciencia y la Oficina de Presupuesto del Congreso. Por ejemplo, las Academias Nacionales proyectan avances tecnológicos a 2030, y todavía no encontraron beneficio de salud o del medio ambiente a la conducción de un vehículo eléctrico.
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