Notas, Sustentabilidad

Proyección de México hacia un país de servicios turísticos (III)

Educación turística y gastronómica
La proyección de México hacia un país de servicios turísticos debe ser bien cimentada en la preparación de personal que brinde la más alta calidad y atención a los turistas.

La gama de escuelas y opciones en México es vasta y quizá no encuentre alguna limitante en cuanto a oportunidades para preparase bien. Bachilleratos tecnológicos y carreras técnicas son de las primeras opciones y en este rubro es plausible el esfuerzo que hacen estudiantes de los Conaleps para seguir los pasos del turismo y la gastronomía.
No son carreras chics ni boom a seguir por salir en televisión y portadas de periódicos o revistas. Generalmente, implican sacrificios de largas y extenuantes jornadas laborales mientras la gente disfruta de vacaciones y descansos. Somos nosotros quienes debemos estar ahí para atenderlos.

Repetidamente escucho que las personas que buscan estas profesiones lo hacen para recorrer el mundo, socializar, porque no les gustan las matemáticas, quieren ser sus propios  jefes o porque es “padre”. Claro que lo es y se puede recorrer el mundo y socializar, pero las matemáticas están implícitas en gastos, costos, recetas y manejo de cuentas.
Hay muchas satisfacciones en esta carrera. Como cocinero, encuentro un arte efímero que, día a día, se refleja en la satisfacción y admiración por el platillo que pidió el comensal, pero es importante que todo interesado busque la experiencia de ser un aprendiz, que conozca el lado difícil y demandante que está en sus inicios en la limpieza de pisos y ollas, atención a cuartos, en los camastros de playa o ser asistente del bar o garrotero.

Para saber mandar hay que saber obedecer y mejor sabrá mandar quien mejor sepa obedecer. Así que no espere que al salir de una institución educativa las puertas de los hoteles y cocinas estarán abiertas para ser los grandes jefes. Es una industria ávida de profesionales eficientes, pero habrá que picar piedra y labrar camino antes de mandar y ser jefe.
Hay  educación media superior con especialidad en turismo y gastronomía en el sector oficial como CBTIS, Tecnológicos o Conaleps; también hay preparatorias privadas. Existen cursos y diplomados, carreras técnicas que pueden terminarse en año y medio a dos, carreras a nivel licenciatura y una amplia gama de especialidades y maestrías.

Si requiere información detallada sobre alguna escuela o curso que busque conforme a la edad, especialización y zona geográfica, envíe sus dudas y comentarios al correo electrónico.

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Proyección de México hacia un país de servicios turísticos (III)

PROYECCION DE MEXICO HACIA PAIS
DE SERVICIOS TURISTICOS (III)
Educación turística y gastronómica
Chef Alfredo Alvarez
a proyección de México hacia un país de
servicios turísticos debe ser bien
cimentada en la preparación de personal que brinde la más alta calidad y atención a los turistas.
La gama de escuelas y opciones en México es vasta y quizá no encuentre alguna limitante en cuanto a oportunidades para preparase bien. Bachilleratos tecnológicos y carreras técnicas son de las primeras opciones y en este rubro es plausible el esfuerzo que hacen estudiantes de los Conaleps para seguir los pasos del turismo y la gastronomía.
No son carreras chics ni boom a seguir por salir en televisión y portadas de periódicos o revistas. Generalmente, implican sacrificios de largas y extenuantes jornadas laborales mientras la gente disfruta de vacaciones y descansos. Somos nosotros quienes debemos estar ahí para atenderlos.
Repetidamente escucho que las personas que buscan estas profesiones lo hacen para recorrer el mundo, socializar, porque no les gustan las matemáticas, quieren ser sus propios  jefes o porque es “padre”. Claro que lo es y se puede recorrer el mundo y socializar, pero las matemáticas están implícitas en gastos, costos, recetas y manejo de cuentas.
Hay muchas satisfacciones en esta carrera. Como cocinero, encuentro un arte efímero que, día a día, se refleja en la satisfacción y admiración por el platillo que pidió el comensal, pero es importante que todo interesado busque la experiencia de ser un aprendiz, que conozca el lado difícil y demandante que está en sus inicios en la limpieza de pisos y ollas, atención a cuartos, en los camastros de playa o ser asistente del bar o garrotero.
Para saber mandar hay que saber obedecer y mejor sabrá mandar quien mejor sepa obedecer. Así que no espere que al salir de una institución educativa las puertas de los hoteles y cocinas estarán abiertas para ser los grandes jefes. Es una industria ávida de profesionales eficientes, pero habrá que picar piedra y labrar camino antes de mandar y ser jefe.
Hay  educación media superior con especialidad en turismo y gastronomía en el sector oficial como CBTIS, Tecnológicos o Conaleps; también hay preparatorias privadas. Existen cursos y diplomados, carreras técnicas que pueden terminarse en año y medio a dos, carreras a nivel licenciatura y una amplia gama de especialidades y maestrías.
Si requiere información detallada sobre alguna escuela o curso que busque conforme a la edad, especialización y zona geográfica, envíe sus dudas y comentarios al correo electrónico. r
alfrado_2000@hotmail.com

PROYECCION DE MEXICO HACIA PAISDE SERVICIOS TURISTICOS (III)  Educación turística y gastronómica
Chef Alfredo Alvarez
a proyección de México hacia un país de  servicios turísticos debe ser bien  cimentada en la preparación de personal que brinde la más alta calidad y atención a los turistas. La gama de escuelas y opciones en México es vasta y quizá no encuentre alguna limitante en cuanto a oportunidades para preparase bien. Bachilleratos tecnológicos y carreras técnicas son de las primeras opciones y en este rubro es plausible el esfuerzo que hacen estudiantes de los Conaleps para seguir los pasos del turismo y la gastronomía. No son carreras chics ni boom a seguir por salir en televisión y portadas de periódicos o revistas. Generalmente, implican sacrificios de largas y extenuantes jornadas laborales mientras la gente disfruta de vacaciones y descansos. Somos nosotros quienes debemos estar ahí para atenderlos. Repetidamente escucho que las personas que buscan estas profesiones lo hacen para recorrer el mundo, socializar, porque no les gustan las matemáticas, quieren ser sus propios  jefes o porque es “padre”. Claro que lo es y se puede recorrer el mundo y socializar, pero las matemáticas están implícitas en gastos, costos, recetas y manejo de cuentas. Hay muchas satisfacciones en esta carrera. Como cocinero, encuentro un arte efímero que, día a día, se refleja en la satisfacción y admiración por el platillo que pidió el comensal, pero es importante que todo interesado busque la experiencia de ser un aprendiz, que conozca el lado difícil y demandante que está en sus inicios en la limpieza de pisos y ollas, atención a cuartos, en los camastros de playa o ser asistente del bar o garrotero. Para saber mandar hay que saber obedecer y mejor sabrá mandar quien mejor sepa obedecer. Así que no espere que al salir de una institución educativa las puertas de los hoteles y cocinas estarán abiertas para ser los grandes jefes. Es una industria ávida de profesionales eficientes, pero habrá que picar piedra y labrar camino antes de mandar y ser jefe. Hay  educación media superior con especialidad en turismo y gastronomía en el sector oficial como CBTIS, Tecnológicos o Conaleps; también hay preparatorias privadas. Existen cursos y diplomados, carreras técnicas que pueden terminarse en año y medio a dos, carreras a nivel licenciatura y una amplia gama de especialidades y maestrías. Si requiere información detallada sobre alguna escuela o curso que busque conforme a la edad, especialización y zona geográfica, envíe sus dudas y comentarios al correo electrónico. r
alfrado_2000@hotmail.com

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