Con base al trabajo de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) para reintroducir la subespecie de lobo gris mexicano en vida silvestre, se registró en conjunto con la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), el nacimiento de cuatro crías en el estado de Chihuahua. Se estima que los lobeznos, cuentan con aproximadamente 10 semanas de edad.
Con este registro, se celebra a la segunda generación de lobo mexicano nacida en vida silvestre dentro del país y con ello, la población es de 31 ejemplares.
A la par, el 25 de marzo nacieron en cautiverio una camada de seis crías, cuatro machos y dos hembras en el Parque Ecológio el Ocotal, perteneciente a la Comisión Estatal de Parques Naturales y de la Fauna en el Estado de México. Estos ejemplares son posibles candidatos a ser liberados.
Estos logros son producto de la cooperación binacional entre los gobiernos de México y Estados Unidos, liderada por la CONANP, en la que participan 52 centros de manejo y reproducción en cautiverio.
Entre los centros que participan en el programa, se encuentra el Parque Ecológico El Ocotal, mismo que cuenta con albergue especial para los lobos cuya superficie es de aproximadamente 5,679.82 metros cuadrados y dos madrigueras artificiales con sistema de iluminación fotovoltaica.
Como antecedente a finales, en los años 70 se capturaron en México los últimos ejemplares de lobo mexicano en vida libre para dar inicio a los esfuerzos de recuperación de la subespecie, a través del programa de manejo y reproducción en cautiverio. Gracias a ello la CONANP reintrodujo por primera vez un grupo familiar de lobos en 2011 en Sonora y a partir del 2012 en Chihuahua.
El lobo gris mexicano puede llegar a medir entre 130 y 180 cm. Los adultos llegan a tener un peso promedio de 21 a 41 kg. Se reproducen en invierno y su gestación dura 62 días.
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