Delegaciones de la CNC y de otras organizaciones agrarias, de distintas entidades del país, acompañaron al Presidente Enrique Peña Nieto a la celebración del aniversario de la promulgación de la Ley Agraria, de Venustiano Carranza, del 6 de Enero, en su cuna: Veracruz. Ante ellos el Presidente hizo importantes pronunciamientos y precisiones:
Reiteró su compromiso de trabajar, coordinadamente con las organizaciones sociales y campesinas y los tres órdenes de gobierno, para que el campo pueda avanzar. Sobre todo, hacia mejores oportunidades para su gente. La tierra, dijo, nos une, nos identifica, nos da cohesión. Los componentes de nuestro territorio tienen valor estratégico para el desarrollo: extensión, diversidad biológica, dimensión de litorales, las playas más hermosas del mundo, el mar patrimonial proveedor de importantes recursos, dan a nuestro país grandes ventajas de desarrollo frente a otras naciones..
Para cumplir la tarea, entre otras acciones, se ha transformado la Secretaría de la Reforma Agraria. Ahora es de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano. Con atribuciones para impulsar el desarrollo del campo y del país bajo un enfoque integral. Lo que era la SRA se transforma, para impulsar un nuevo desarrollo rural y urbano para que de manera sustentable ofrezca a las generaciones presentes y futuras mejor calidad de vida.
Son algunas de sus responsabilidades:
Potenciar el desarrollo agrario en un clima de paz, de certeza jurídica. Promover el desarrollo habitacional y urbano en armonía con el Medio Ambiente. Prever reservas territoriales para vivienda y suelo urbano cuidando disponibilidad de agua. Considerar la vinculación del desarrollo urbano con las vocaciones económicas del campo. Se dará renovado impulso a la planeación para el desarrollo regional. Como parte de ese esfuerzo, la Secretaría promoverá la construcción de obras de infraestructura y equipamiento mediante la suma de recursos de los sectores público, social y privado.
Es su responsabilidad contribuir al crecimiento ordenado de los asentamientos urbanos y centros de población pues buena parte del desarrollo urbano de los últimos años se ha dado sobre tierras ejidales o pequeña propiedad. Se propone una planeación integral que armonice el desarrollo rural con una adecuada planeación urbana para garantizar servicios suficientes y óptimos para una mejor calidad de vida.
Precisa el Presidente: debemos identificar con precisión las vocaciones de cada región, de cada estado, para potenciar el territorio de manera inteligente. Acercar la producción de los núcleos agrarios al consumo de las ciudades y proteger el valor real de la tierra poniendo fin a la especulación.
Propone restablecer la fuerza y la rectoría del Estado a fin de propiciar un desarrollo ordenado, en legalidad, con justicia. Hacer del territorio base de la planeación social y económica.
Reitera, se debe reactivar la actividad del campo, hacer parte del nuevo impulso transformador a todas las organizaciones vinculadas al campo, más allá de liga política o afinidad ideológica. Asegurar un rostro renovado para el campo, alejado del que lamentablemente le ha acompañado por décadas: pobreza, marginación, falta de oportunidades. Queremos un campo justo, productivo, rentable, sustentable. Son pilares de la orientación que tendrá la política pública del Gobierno de la República en su actuación.
El Presidente Enrique Peña Nieto confirma su visión de Estado y alienta expectativas de quienes consideran al Medio Ambiente como un valor esencial del hombre. Tierra, diversidad biológica, litorales, playas, mar patrimonial, campo, desarrollo agrario, armonía con la Naturaleza, disponibilidad de agua, vocación del campo y regional, crecimiento ordenado de asentamientos, calidad de vida, sustentabilidad, valor real de la tierra, son conceptos que fundamentan la labor editorial de Mi Ambiente.
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