* El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Mauricio Hernández Ávila, inauguró la primera Reunión de Trabajo de la Coalición Mesoamericana por la Educación Integral en Sexualidad
La educación sexual integral evita embarazos no deseados en adolescentes, y enfermedades sexuales.
Una información sobre educación sexual integral, basada en evidencia científica, es la mejor herramienta para que los adolescentes eviten embarazos no deseados e infecciones de transmisión sexual, como el VIH/Sida, enfatizó Mauricio Hernández Ávila, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud.
Al inaugurar la primera Reunión de Trabajo de la Coalición Mesoamericana por la Educación Integral en Sexualidad, en la que participaron más de 30 organizaciones civiles de la región, subrayó que, de acuerdo con estudios científicos, cuando los jóvenes cuentan con información clara y precisa sobre este tema, adquieren la capacidad de tomar decisiones responsables respecto a su sexualidad.
Por ejemplo, puntualizó, reducen el número promedio de parejas sexuales e incrementan también el uso de anticonceptivos y condones, lo que disminuye el riesgo de posible contagio por infecciones de transmisión sexual, así como embarazos no planificados.
Destacó la importancia de la educación sexual integral, ya que en México el 20% de las nuevas infecciones de VIH, se presentan en jóvenes de 15 a 24 años. De los 37 mil casos de Sida reportados en 2008 en adolescentes y jóvenes entre 15 y 29 años, 30 mil fueron en hombres y siete mil en mujeres.
Los adolescentes mexicanos inician su vida sexual entre los 15 y 19 años, en algunos casos lo hacen a los 12 años. De ellos, sólo el 42% de mujeres y 74% de hombres utilizó algún método anticonceptivo en su primera relación sexual.
Asimismo, una de cada tres mujeres con hijos tuvo su primer embarazo en la adolescencia y, en la actualidad, cerca del 21% del total de partos atendidos en el país corresponde a adolescentes.
Señaló que ante estas evidencias el Programa Sectorial de Salud 2007-2012 plantea diversas estrategias dirigidas a promover, principalmente entre los adolescentes mexicanos, la actividad sexual responsable.
Para ello, dijo, se trabaja de forma coordinada con diferentes instancias gubernamentales e internacionales, de la cual se derivó la Primera Reunión de Ministros de Salud y Educación para detener el VIH en América Latina y el Caribe, el primero de agosto del 2008, en el marco de la Conferencia Mundial del Sida.
En esta reunión, se aprobó la Declaración Mundial Prevenir con Educación, cuyo principal propósito es posicionar la prevención basada en educación sexual integral y en la promoción de la salud sexual y reproductiva como un eje fundamental para responder de manera efectiva a la epidemia del VIH y elevar la calidad de vida de las personas.
También se llevó a cabo la Consulta Técnica Regional sobre las Directrices Internacionales para Educación en Sexualidad y otra Documentación, con el fin de asegurar estándares mínimos de contenidos basados en evidencia científica para la educación sexual integral, adecuada para niños, niñas, adolescentes y jóvenes.
El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud indicó que, a través del Centro Nacional para la Prevención y Control del VIH/Sida, se han lanzado convocatorias públicas para financiar proyectos de las organizaciones de la sociedad civil, sobre prevención focalizada en la transmisión sexual del VIH/Sida y otras infecciones de transmisión sexual.
Por ejemplo, este año se otorgó un financiamiento para 71 proyectos con un monto cercano a 30 millones de pesos, cuyo objetivo principal es promover la educación integral como una medida indispensable en la prevención y promoción de la salud.
Comentó que estos logros han sido posible a la constante e incansable labor de diálogo activo y constructivo con los grupos organizados de la sociedad civil mexicana que han impulsado la educación sexual integral.
Sin embargo, es necesario fortalecer la coordinación intersectorial y multidisciplinaria entre los sectores de educación y salud, así como con las demás instancias gubernamentales y la sociedad civil e instituciones académicas, a fin de posicionar a la educación integral de la sexualidad y la promoción de la salud sexual y reproductiva como temas relevantes en la agenda pública.
Actualmente, ya es una urgencia el asegurar que los jóvenes tengan un acceso efectivo a los servicios de salud para atender sus necesidades y demandas de salud sexual y reproductiva, en particular, se deben continuar y redoblar los esfuerzos para garantizar el acceso efectivo de adolescentes y jóvenes que así lo requieren a consejería y pruebas de detección para VIH.
Finalmente, ratificó el compromiso de cumplir con las metas planteadas en la Declaración Ministerial Prevenir con educación, enfocadas a reducir el número de escuelas que no imparten Educación sexual integral, así como disminuir el número de adolescentes y jóvenes que no tienen cobertura de servicios de salud amigables.
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