Rafael Cienfuegos Calderón
En aras de mejorar la atención a sus derechohabientes, los institutos de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) y Mexicano del Seguro Social (IMSS), fortalecerán los programas de medicina preventiva como la mejor estrategia para optimizar el gasto y mejorar la calidad de vida de los mexicanos.
En la presentación de resultados y clausura protocolaria de la campaña “Febrero, Mes de la Salud del Hombre”, la cual se pretende permanezca todo el año en el sector salud nacional, los directores de ambas instituciones, José Reyes Baeza y Mikel Arriola, respectivamente, se comprometieron a continuar fomentando la prevención para lograr incidir en las tasas de mortalidad.
Reyes Baeza destacó que por cada peso que se invierte en medicina preventiva se ahorran cuatro en medicina curativa y aseguró que “los recursos deben estar especialmente aplicados en el primer nivel de atención, que es el muro de contención, lo que impactará en una mejor calidad de vida de los derechohabientes”.
Sobre los resultados, en las 35 delegaciones del ISSSTE en el país se realizaron 471 mil 121 acciones de salud preventiva, 221% más de la producción ordinaria mensual. Se aplicaron 33 mil 50 pruebas de antígeno prostático y 33 mil 972 cuestionarios de evaluación de síntomas prostáticos; en el Programa de Prevención y Regresión del Sobrepeso y la Obesidad se hicieron 108 mil 107 mediciones de índice de masa corporal y con base a las detecciones se incorporaron 4 mil 104 pacientes al programa.
Otros servicios preventivos otorgados a varones derechohabientes fueron la aplicación de 2 mil 852 encuestas de detección de factores de riesgo para la salud; 166 mil 277 mediciones de hipertensión arterial y 122 mil 256 pruebas capilares de glucosa para detección oportuna de diabetes.
El ISSSTE gasta anualmente más de 15 mil millones de pesos en atender cinco enfermedades crónicas degenerativas: cáncer, padecimientos cardiovasculares, insuficiencia renal, hipertensión y diabetes, y, en consecuencia, informó su director, se va a cambiar esta tendencia enfocando nuestro modelo de salud a la prevención.
El director del IMSS, Mikel Arriola refirió que en 2015 el gasto para tratamientos de cáncer de próstata ascendió a 990 millones de pesos, sólo por debajo del gasto en tratamientos de cáncer de mama. Esta inversión ha dado como resultado que en 2013 y 2015 aumentara en más de 28% la detección de derechohabientes con cáncer de próstata y una reducción de 9% en defunciones con respecto al trienio anterior.
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