En conferencia de prensa, Alejandro Calvillo, director de El Poder del Consumidor, indicó que sin acceso de la población a agua de calidad para beber fracasará la Cruzada Nacional contra el Hambre y la Estrategia Nacional para la Prevención y el Control del Sobrepeso, la Obesidad y la Diabetes.
Ello debido a que en la actualidad los menores de edad, optan por el consumo de productos chatarra y refrescos para saciar su sed como hambre, ello ante la imposibilidad de acceder al agua potable.
Informó que México no es sólo el mayor consumidor de refrescos en el mundo (163 litros por persona al año) es también el mayor consumidor de agua embotellada (234 litros por persona al año) y que una de esas causas es por la falta de acceso a agua de calidad para beber.
Citó al Presidente Enrique Peña Nieto, quien declaró que el propósito de impuestos como el de la comida chatarra y el refresco: “Es reducir el consumo de estos productos asociados al incremento del sobrepeso y la obesidad entre los mexicanos. Para potenciar el efecto favorable de esta Reforma es de esperar que los Señores Legisladores también aprueben una partida presupuestal al gasto en salud en programas de prevención de sobrepeso y la obesidad así como medidas para incrementar el acceso a agua potable en centros escolares”.
Por ello, hizo un llamado para que se cumpla a cabalidad este objetivo y no se recule en materia de acceso a bebederos en los planteles escolares del sistema básico nacional, proyecto que de acuerdo al Centro de Estudios de las Finanzas Públicas requiere de una inversión a tres años de poco más de 9 mil millones de pesos, considerando una inversión de 3.5 mil millones de pesos en 2014.
Dictamen que se encuentra en el Senado para ser discutido en las Comisiones de Educación y Estudios Legislativos en el próximo periodo de sesiones (febrero-abril) que inicia en unos días y que espera que por cuestiones políticas no se frene en dicho recinto lesgislativo ya que en la Cámara de Diputados dicho proyecto paso de forma expedita con un voto unánime de los legisladores.
Dijo que “en una encuesta realizada en diciembre pasado en la capital del país, el 86% de los entrevistados expresaron que apoyaban que los recursos obtenidos por el impuesto al refresco se destinaran a la introducción de bebederos de agua en las escuelas. El 92% de los padres entrevistados señaló que ha intentado aumentar el consumo de agua de sus hijos. La encuesta presenta también un aumento en la preocupación por los impactos en la salud de consumir refrescos”.
Por su parte, Brenda Rodríguez de la Coalición de Organizaciones Mexicanas por el Derecho al Agua (COMDA) señaló que los problemas se centran en la cantidad de agua, como en su calidad. Y solo podrán solucionarse si la gestión del agua se realiza bajo un modelo que verdaderamente tienda a la gestión sustentable y con equidad del agua, como se solicita en la modificación constitucional del artículo 4to (8 de febrero 2012), y se propone en la iniciativa ciudadana para la Ley General de Aguas, que ha sido presentada por un gran número de organizaciones civiles y académicos.
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